Futbolistas penínsulares que jugaron fútbol profesional
1.-Alberto Spencer Herrera, considerado el mejor jugador ecuatoriano de la historia, además de ser el goleador histórico de la Copa Libertdadores de América, y según la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol, es uno de los 20 mejores futbolistas sudamericanos del siglo XX. Nació en Ancón -provincia de Santa Elena-. En las décadas de los 70 y 80 salieron varios futbolistas penínsulares al fútbol profesional, entre ellos los más conocidos:
2.- Edgar el «Negro’ Barreto, de la selección de Salinas al futbol de segunda del Guayas con Luq San en 1976. Luego pasa al Valdez en 1978, jugó en Manta S.C. en 1979 y en LDU de Portoviejo en 1980. Era un marcador fuerte, no tan técnico pero lleno de pundonor, muy rápido -especialmente en los cierres-.
3.- Alberto «Betico» Oyola, era un defensor de buena ubicación con aceptable técnica. Era atrevido, iba siempre para adelante y asfixiaba en la marca, aguerrido y muy eficaz en la marca y de gran apoyo ofensivo. Recordado por el gol del empate en el último minuto contra el Cosmos de New York en Guayaquil, jugando para el Barcelona en 1976.
Sus inicios fueron con la selección de Salinas y el Club Once Deportivo de la Libertad; en 1973 fue vendido al América de Quito y en 1976 jugó para el Barcelona de Guayaquil hasta 1978, y en 1979 el C.S. Emelec lo lleva a sus filas hasta 1981. Se retira del fútbol en 1982 con el Deportivo Cuenca.
4.- Freddy Jurado, buen marcador de punta. Debuta muy joven con el C.S. Emelec en 1982. Era muy aguerrido, de buena técnica y rapidez, con atrevimiento tanto para marcar y atacar. Tuvo un breve paso por Filanbanco de Guayaquil en 1984, y en la auctualidad es una persona trabajadora que ayuda a formar a los jovenes en el fútbol: un profesional con título de entrenador y formador de los jovenes del futuro.
5.- Manuel el «Cholo» Landeta, gran volante de marca de la selección de Salinas para el fútbol machaleño, con Audaz Octubrino en 1978. Era un todo terreno, un ‘correcamino’, un «siete pulmones», y muy temperamental que hacía respetar el medio campo. Lamentablemente falleció muy joven en un accidente en Puerto Bolívar.
6.- Marco Augusto Barbosa Proaño, el «Puro Musculo» de la selección de Salinas. Fue llamado en 1972 por la selección del Guayas, y de paso los dirigentes del C.S. Emelec lo llevan a sus filas. De fuerte marca, muy pegajoso y aguerrido, luchaba en cada jugada, poseedor de un remate potente, y muy sólido en el juego aéreo. Tenía buena condición física por lo que ventilaba constantemente en su posición de marcador. Era temperamental e iba con frecuencia a la acera de al frente a colaborar con el juego ofensivo de su equipo. En 1977 jugó para Luq San de Guayaquil.
7- Pedro el «Potro» Muñoz, era el clásico pescador de área, muy vivo para desmarcarse y aparecer oportuno. Muy rápido para desplazarse y definir con mucha frialdad. Con muy buena trayectoria en el fútbol profesional: 9 de Octubre (1983-1986), Filanbanco (1986-1990), LDU de Quito (1988), Deportivo Quito (1991), Valdez (1992), Delfín (1993), LDU de Portoviejo (1994) Emelec (1995) y Espoli de Quito (1996) Seleccionado Sub-20, Sub-23 y preselección de mayores.
8.- Víctor el «Cholo» Cueva. Se inició en el fútbol con los Gigantes del Pacífico; luego fue a Guayaquil a jugar con Estudiantes del Guayas; salió seleccionado del Guayas en dos años seguidos, primero en 1976 y luego en 1977; de ahí pasó al Milagro Sporting que subió a la serie B, en 1978, donde debutó profesionalmente. Luego en 1979 pasó a LDU de Cuenca hasta 1980 en que ascendió a la serie A. Regresa a Estudiantes del Guayas a préstamo en 1981 y al Milagro Sporting en 1982 y en 1983 vuelve al fútbol azuayo con LDU de Cuenca hasta 1985.
9.- Wilmer Gómez Freire, otro penínsular del Club Once Deportivo. Llegó al fútbol capitalino, fichando por el Deportivo Quito, en 1970. Era un puntero endiablado, imparable sobre el gramado del Atahualpa que enloquecía al rival y se robaba los aplausos. En su momento, se convirtió en el jugador más cotizado del momento, y en 1974 su transferencia al Emelec fue todo un suceso, pero lamentablemente no pudo mostrar su fútbol con los eléctricos.
10.- Y por último, José Francisco Cevallos, «las manos del Ecuador». Llegó al equipo en 1990, incluso fue parte del plantel que clasificó a la primera final, siendo alterno de Carlos Luis Morales. En 1991, Pepe Pancho se convierte en figura clave de la institución, ya que en la liguilla de aquel año, ‘Pestañita’ fue expulsado y en la banca no estaba Víctor Mendoza, quien era el segundo arquero del equipo, y se había convocado a ‘Cevallitos’, el tercer golero. El técnico ordena el ingreso del joven José Francisco para que se estrene con un lanzamiento penal, quien ante la sorpresa y algarabía de todos le bloquea el lanzamiento a Fernando Barboza, el goleador uruguayo de los Chullas, lo que posteriormente le permite a Barcelona ganar de visitante 2-1. Lo demás ya es historia conocida en cuanto a todo cuanto ganó este histórico portero, mundialista con la selección ecuatoriana en 2002.
Por Jorge Novillo
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